Leo tuvo la oportunidad de viajar una vez al pasado. Leo tenía 22 años cuando se encontraba en la ducha, meditando, pensando en todo lo que estaba cambiando esos días y las vueltas que da la vida. Sintió un fuerte deseo de viajar al pasado.
Cuando salió de la ducha y se enfundó su albornoz se quedó mirándose a la cara que le mostraba el espejo. Frunció el ceño todo lo que pudo, posó sus manos en las caderas y se concentró en esa idea tan absurda.
De repente sintió que algo cambiaba y se vio a sí misma, en ese mismo baño cuando tenía 14 años. La Leo del pasado se quedó mirando a la Leo del futuro, se reconoció al instante. Y la Leo del futuro, que aun estaba en albornoz, se acercó a su propio Yo y cogiéndose por los hombros, y mirándose a los ojos, y sonriéndose como si se conociera, y hablándose con voz densa y profunda, se dijo a sí misma:

- Tranquila, cuando tengas 22 años.... vas a "flipar". Ni te imaginas la cantidad de cosas que vas a vivir. Te conozco bien y sé que esto que te digo no se te va a subir a la cabeza, sigue así. Dentro de unos años tendrás tu recompensa. Si te cuento lo que te pasará no te lo vas a creer. Es mejor que lo descubras por ti misma. Acuérdate de mí cuando eso suceda.

No hay comentarios: